En un mundo cambiante y tecnológico como el actual, no son pocos los proyectos que van más allá de la tradicionalidad y, haciendo uso de las nuevas facilidades de la industria del diseño y la creación, sorprenden con productos que años atrás habrían sido inconcebibles. Ejemplo de ello es la tecnología de impresión en 3D, que a pesar de llevar tiempo en el mercado, las posibilidades de innovar que ofrece a la hora de crear objetos cotidianos, como pueden ser los palos para jugar al golf, asombra aún día tras día.
Todo proyecto nace de una idea. Cuando el francés y gran amante del golf Clément Pouget-Osmont se percató en su momento de las auténticas virguerías que permitía la vanguardista impresión en 3D se propuso un reto: diseñar palos de golf para él y sus amigos desde su apartamento parisino usando esta tecnología. Como sus creaciones tuvieron gran aceptación y él disfrutaba haciéndolo, dicha tarea le llevaría posteriormente a lanzar su exclusiva firma de palos personalizados, Grismont.
Los modelos que conforman la marca son concretamente tres ediciones limitadas, que a simple vista son como verdaderas piezas de expositor por su gran precisión en los acabados. De hecho, la gama con su diseño quiere evocar la magnificencia y misticismo de las esculturas antiguas asiáticas y de la arquitectura árabe.
Así, el primero de ellos, Ori, de diseño entrecruzado y acabado en oro, quiere imitar los típicos ventanales árabes enrejados llamados Mashrabiyya de la Edad Media. El segundo, Cés, en cambio, se inspira en las esculturas ancestral de Asia con un diseño que emula las nubes que decoran los templos orientales, y en tercer lugar, el modelo Air es una reinvención de la parte trasera del palo de golf moderno con una estructura de reja que deja ver a través de ella, y resulta un auténtico reto en cuanto a la tecnología de impresión 3D aplicada al golf se refiere.
Elaborados de manera artesanal y por encargo, cada modelo es único y hecho a medida, con un diseño resultante muy elegante, con detalles y bien trabajado gracias en parte a la tecnología 3D. No obstante, todo ello lo hace posible el equipo de artesanos que hay detrás, con nombres como Jean Michel Quéva (de los primeros en Francia) o Nicolas Tourkia y los artistas del diseño Linlin y Pierre-Yves Jacques, quiénes se encargan del proceso de impresión en 3D en cada cabeza de los palos. En conjunto, se consigue un producto fruto de un cuidadoso proceso mecánico que ofrece un rendimiento óptimo en el campo y un placer para la vista del jugador en el mismo.
La firma Grismont sabe la importancia de tener un buen equipo de golf para los amantes de este deporte, y es por ello que, a pesar de que ofrece sus modelos con las medidas estándares y tanto para diestros como zurdos, incluso da la posibilidad de concebirlos a medida para cada golfista. Para ello, basta con enviar a los técnicos de la marca un vídeo mostrando un swing con el palo para así poder elaborar el modelo perfecto para cada persona. Solo así se garantiza un estilo inigualable en el campo, no solo por la precisión en los movimientos gracias a un equipamiento de calidad, sino por la belleza en el diseño de creaciones como los que ofrece la firma francesa.
© Imágenes palos de golf Grismont
Etiquetas: Grismont, Impresión 3D, Magazine de Lujo, Palos de golf, Tendencias de Lujo, The Luxury Trends
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