Francis Kurkdjian es considerado el maestro del perfume, no solo por la calidad excepcional de los ingredientes, sino por el cuidado de éstos y por el elegante diseño de los envases. El perfumista es una persona de lo más exigente y le gusta cuidar hasta el mínimo detalle.

Se reconoce como un viajero del mundo, de espíritu nómada. Es por eso que ha creado Globe Trotter, un estuche para vaporizador de viaje, disponible en un acabado de zinc o dorado, que puede ser recargado con unos botecitos de 11 ml, que se venden por separado en cajas de tres unidades.

Las horas de embarque, de vuelo, de jetlag…Contribuyeron a hacer realidad la idea de crear un accesorio de viaje tan útil y bello.

De esta forma, podremos llevarnos con nosotros nuestros mejores perfumes y no tener que sacrificar nuestra fragancia cada vez que estemos lejos de casa. Una forma de guardar nuestra esencia y cuidar de nosotros. © Fotografía: Francis Kurkdjian