Diversión en casa con el futbolín de Domeau et Pèrés

¿Quién no ha jugado una partida de futbolín en su vida? Casi siempre se encuentran en los bares o en las salas de recreo y forman parte de nuestro recuerdo infantil y adolescente. Es una sensación agradable que nos transmite buenos momentos pasados en compañía de amigos.

Cada vez es más difícil encontrar alguno de ellos en los bares y cafeterías, a veces, parecen cosas del pasado. Sin embargo, en el mundo de la decoración, la idea de tener un futbolín en casa no es tan descabellada. Los fabricantes se han puesto las pilas y han creado verdaderas obras de arte que combinan perfectamente con el entorno en el que se encuentran.

futbolín B90 The Luxury Trends

La firma Bonzini, especialista en la fabricación de futbolines desde 1927, ha colaborado con los tapiceros Domeau et Pèrés para la creación de un futbolín elegante y exclusivo que hará las delicias de las reuniones entre amigos.

Para su creación, Bruno y Phillipe Pères Domeau se inspiraron en la atmósfera de los cafés franceses y la sensación de júbilo que representa jugar al futbolín. Su idea era poder revivir esa sensación pero en nuestra propia casa.

Futbolin de lujo The Luxury Trends

El futbolín B90 tiene estructura de haya y revestimiento de cuero, que puede ser en color blanco o negro, aunque, bajo petición, se puede hacer del color que se quiera. Los jugadores son de aluminio para un equipo, y cromo para el otro. Funciona sin monedas y tiene el retorno de la bola por los dos lados. Se suministra con 6 bolas que pueden ser de plástico o corcho, según elección.

La casa Bonzini utiliza materiales de la mejor calidad para la fabricación de sus piezas, asegurando con ello una gran durabilidad. Todos sus productos tienen barras telescópicas y los muñecos son de aluminio. Más del 30 % de su producción se exporta a 60 países.

futbolín de Domeau et Pèrés The Luxury Trends

Hay versiones muy contradictorias sobre quién es el inventor del futbolín, puesto que tanto Alemania, Francia, Gran Bretaña y España aseguran que fueron ellos los creadores. La versión española dice que fue Alejandro Finisterre que, tras la Guerra Civil estuvo en varios hospitales y vio como los jóvenes no podían salir al exterior a jugar. Como era un gran aficionado al tenis de mesa, decidió crear una mesa igual para que, en lugar de tenis, los enfermos pudieran jugar al fútbol.

Cierta o no, la historia es bonita y nos ha permitido disfrutar de este juego, siempre en compañía de buenos amigos. Ahora, tenemos la oportunidad de poder disfrutar de ello en casa con un diseño elegante y moderno que hará las delicias de nuestras reuniones familiares.

© Imágenes Futbolín Domeau et Pèrés