Los relojes, al igual que los coches, necesitan su puesta a punto y que todo su mecanismo esté correctamente lubricado para un buen funcionamiento. Cuando no se utilizan, sus piezas pueden resecarse y dejar de funcionar. Del mismo modo, los relojes automáticos sólo están en marcha cuando se llevan puestos, ya que es el movimiento de la muñeca el que activa su mecanismo. Para evitar esos problemas, en el mercado existen bobinadoras o cargadores de relojes que, con un pequeño movimiento constante, evitan que los relojes se detengan y mantengan su mecanismo correctamente lubricado para controlar su desgaste.
Un buen ejemplo es Gyrowinder, una bobinadora creada por Döttling con un diseño muy especial y con unas prestaciones superiores a sus competidoras. Su ventaja es que permite un giro completo del reloj en todas las direcciones, a diferencia de otras que giran sobre un solo eje permitiendo únicamente movimientos de izquierda a derecha. Gyrowinder permite el giro de 360 grados, siendo mucho más eficiente que otros instrumentos de su misma gama.
Además, Gyrowinder tiene otras opciones de ajuste que lo hacen único. Gracias a unos contrapesos, permite calibrar de forma individual el peso de cada reloj, ajustando así el movimiento necesario a cada una de las piezas y consiguiendo una mejor eficacia.
Visualmente su diseño recuerda a un giroscopio y tiene reminiscencias de los tradicionales instrumentos de navegación. Sin embargo, su idea no nació en un paseo en barco sino en una visita que Markus Döttling, actual CEO de la empresa y biznieto del fundador, realizó al Centro Espacial Kennedy en Florida. Allí descubrió un instrumento que utilizaban para su entrenamiento los aspirantes a astronautas del que tomó la inspiración para su Gyronwinder.
Este instrumento de alta precisión está situado bajo una cúpula de cristal que evita que entre el polvo y funciona también como una caja de seguridad. Su fabricación se realiza bajo pedido y se tardan unos tres meses para que esté terminado, ya que se realiza de forma artesanal con los mejores materiales.
Döttling es una empresa de cajas de seguridad alemana, fundada en 1919. Lleva cuatro generaciones dedicada a la creación de objetos únicos, con los mejores materiales, la última tecnología y siempre realizados a mano. Su saber hacer la ha situado como referente en el mundo del lujo y sus creaciones sorprenden por su diseño y funcionalidad.
© Imágenes Gyrowinder de Döttling
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