¿Qué tienen en común personajes tan diferentes como Popeye, Sherlock Holmes o el mago Gandalf del Señor de los Anillos? Simplemente que los tres fuman en pipa, una afición, cada vez más en desuso, que es todo un ritual y un arte para aquellos que todavía la practican.
Es fundamental saber cagar bien la pipa con la cantidad justa y necesaria, encenderla correctamente y mantenerla encendida con una brasa uniforme. El tipo de tabaco que se utiliza es una mezcla de tabaco, cuya base es Burkey o Virginia en diferentes grados de curación a los que se le añaden tabacos más intensos de sabor. Todo un arte que se consigue a base de práctica y experiencia.
En el mercado existen numerosos tipos de pipas cuya denominación varía en relación a su forma: Billiard, Pot, Prince, Apple, Pear….Y, aunque el material del que están hechas también puede variar, la mayoría están fabricadas en madera de brezo, ya que aguanta bien el calor y es un material maleable para los expertos artesanos que le dan forma. Lo que es importante y primordial en todas ellas es el cuidado y la limpieza de la pipa, puesto que de ello depende su correcto funcionamiento.
Davidoff, referente en el mundo del tabaco, sigue fabricando pipas artesanas desde Italia. Están elaboradas con la mejor madera de brezo, seleccionada meticulosamente para su colección de pipas. Están disponibles en tres acabados: negro tratadas con chorro de arena (Serie 100), lisas tintadas en rojo brillante (Serie 200) o lisas en acabado natural o brillo (Serie 400).
Vector es otro fabricante de pipas de gran calidad, de líneas muy elegantes. Están realizadas totalmente a mano por los expertos artesanos de Saint Claude, localidad francesa famosa por albergar los mejores maestros en este tipo de artesanía.
La marca británica Dunhill también es sinónimo de pipas de gran calidad. En su caso, tiene que ver con el proceso del curado del aceite, inventado por Alfred Dunhill, fundador de la marca. A lo largo de su larga historia, sus pipas han evolucionado -mejores boquillas, cazoletas más estudiadas, caños mejores…-, pero siguen manteniendo su estética clásica y elegante, propias de la distinción que caracteriza a este objeto.
Aunque el arte de fumar en pipa cada vez tiene menos adeptos, todavía hay algunos clubs de amantes y coleccionistas de pipas que realizan degustaciones y reuniones de fumadas, donde los participantes comparten afición y disfrutan del placer de una buena bocanada, aspirada a través de su pipa.
© Imágenes Davidoff; Imágenes Dunhill
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